IT Diseño Industrial: El mejor final posible...

En lo que llevamos de año, han habido, por el momento, dos grandes experiencias dignas de ser recordadas por mi persona: una fue la consecución del título de Liga Municipal, con el equipo senior de Los Olivos; y la otra ha sido, sin duda, el día de la presentación de mi Proyecto final de carrera, de Ingeniería técnica en diseño industrial.

Este último, también es digno de ser redactado y compartido con todo el que lea este blog. Para mis amigos y parientes más cercanos que no pudieron estar este día, esta es una buena forma de hacerlos participe y compartir con ellos este gran momento.

El día 28 de Junio de 2013 pasará a la historia de mi vida como otra de las fechas que nunca olvidaré. Este fue el día en que terminé la carrera, y de la mejor de las maneras posibles.

Durante el mes de Junio, tras entregar la memoria del PFC, me dediqué en cuerpo y alma a realizar una presentación que estuviera a la altura del proyecto realizado. Tras meses pegado a la pantalla del ordenador, renderizando y escribiendo, había que darle el último gran empujón al proyecto, y hacer una buena presentación. Como ya me advirtieron: la presentación marcará la calificación del proyecto, incluso más que el trabajo escrito. Por ello, durante un duro mes de no parar, hice lo máximo para que dicha presentación estuviese lo más trabajada posible.

Cuando llegó el día de la presentación del PFC, no estaba nervioso. Mi actitud los días previos era tranquila. Quería disfrutar de la presentación y vivirla al máximo. Además, el trabajo que había detrás de todo esto era inmenso, con lo cual, podía estar muy tranquilo en este aspecto. También, el saber que casi todos mis amigos y familiares más cercanos estaban allí, me daba más confianza.

Al comenzar la exposición, quizás si que estuve un poco nervioso. Pero conforme fue avanzando mi exposición, como siempre, me fui relajando y sacando mis dotes "comerciales". Ciertamente me gusté mucho durante esta. Estuve relajado y disfruté del momento, y el tribunal se dió cuenta. Era crucial para cuajar una buena presentación, y así ocurrió.

Después de la exposición, el tribunal, compuesto por tres profesores que me dieron clase, dio su opinión acerca del trabajo y la exposición. Todos me dieron la enhorabuena por la exposición. Les encantó la forma de exponerla, las animaciones y el formato, estaban muy contentos con esto. Por otro lado también les gustó mucho el trabajo realizado.

Tras hacerme algunas preguntas acerca del trabajo, ponerme un poco a prueba y volverme a dar la enhorabuena, invitaron a todos los presentes a abandonar la sala para decidir la calificación.

Yo estaba feliz. Había hecho una buena presentación. Los presentes me felicitaron también por ello. Además, el tribunal se quedó muy contento con mi exposición. Tenía muy buena pinta todo.

Tras unos minutos, el tribunal dio paso a todos y emitió su veredicto: MATRICULA DE HONOR. Fue uno de los momentos más memorables, sin duda. No sabía como reaccionar por un momento. Dí las gracias a todo el tribunal y me fui con los míos a celebrarlo. 

Era la calificación que siempre busqué durante la realización del proyecto, la que trabajé, y la conseguí. Era el final, desde mi humilde ver, más difícil y lo conseguí. Como me sentí? Simplemente, era muy feliz.

Se cierra por tanto uno de los mejores capítulos de mi vida con un final más que feliz, con un broche de oro que jamás imaginé, y del que nunca me olvidaré.

Gracias a todos los que me habéis ayudado a llegar hasta este momento de esta manera, a mi novia, compañeros de carrera y amigos. También a mi familia, porque sin ellos, nada de esto hubiera sido posible. Gracias también a mis profesores, pero sobretodo a mi directora de proyectos, Paqui, por haberme ayudado a poner este excepcional broche de oro al final de esta carrera.

Ahora puedo decir, orgulloso y feliz, y después de mucho sufrir y estudiar, que soy Ingeniero técnico en diseño industrial.

Es el fin de una gran etapa, pero esto no ha hecho más que empezar. Hay mucho por aprender y por lo que luchar a partir de ahora. Esto ha sido un buen ladrillo en el puente entre lo académico y lo laboral, pero aun queda mucho por construir para llegar a ser el profesional que ansío.

Gracias a todos y a seguir...